Al hablar del manejo de las finanzas nos encontramos con profesionales que con su experiencia y conocimiento pueden ayudarnos a organizar nuestro dinero, planificar, y maximizar nuestros recursos.
Antes de contratar un Coach o un Asesor Financiero, es importante conocer cuál es el alcance del trabajo que cada uno realiza, así podrás dirigirte al profesional idóneo que te ayude de la manera más adecuada.
Seguramente te preguntarás ¿cuál es la diferencia entre un coach y un asesor financiero?
PRIMERA DIFERENCIA: EL ENFOQUE
En términos generales el COACH FINANCIERO se enfoca en los aspectos básicos de cómo estás gestionando tu dinero, así como tu comportamiento financiero. Para ello te ayuda a diseñar tu futuro financiero mediante el establecimiento de metas personales, la organización y control de gastos, la identificación de creencias, hábitos y emociones que te están manteniendo endeudado. De esta manera te ayuda a tomar el control de tu dinero, a tomar decisiones adecuadas y caminar hacia la prosperidad de manera integral.
El ASESOR FINANCIERO por su lado, se centra en gestionar de forma más eficiente el dinero que ya tienes, por lo tanto se focaliza en tu cartera de activos proveyendo asesoramiento específico para que maximices tus inversiones a través de la guía técnica de productos y el establecimiento de estrategias financieras que sean más convenientes para ti.
SEGUNDA DIFERENCIA: LA MODALIDAD
El Coach Financiero lleva adelante un PROCESO a través de sesiones personalizadas que pueden tener una frecuencia semanal, quincenal o mensual. Aunque hay una estructura general, el proceso se va adaptando a la realidad del cliente o coachee dependiendo de qué área sea necesario trabajar con mayor énfasis: hábitos, creencias, habilidades, organización, control, etc.
La Asesoría en cambio no requiere de un proceso, sino de reuniones específicas en las que el asesor busca conocer la situación actual del cliente y sus objetivos a futuro para poder ofrecerle las diversas opciones de planificación financiera enmacardas en el ahorro, la inversión, los fondos de jubilación, los seguros de vida, etc.
TERCERA DIFERENCIA: EL TIEMPO
El proceco del Coaching Financiero dependerá de la situación del cliente o Coachee y de su compromiso para tomar decisiones y para llevarlas a la acción de manera constante con el objetivo de lograr cambios en el manejo de su dinero. El Coach puede trabajar en un mínimo de 3 sesiones, extendiéndose según la necesidad del cliente.
El Asesor Financiero en cambio, puede requerir dos o tres reuniones con el cliente para ofrecerle los productos o servicios financieros que se acoplen mejor a su planificación financiera.
CUARTA DIFERENCIA: LAS HERRAMIENTAS Y COMPETENCIAS
El Coach enseña al cliente o Coachee y desarrolla diversas herramientas financieras que le permitan organizar sus finanzas como: el Presupuesto Personal Proyectado a 12 meses, el Plan de Ajuste de Gastos, el Plan para Salir de Deudas, el control de las tarjetas de crédito, tablas de amortización, entre otros. El objetivo es que el Coachee incorpore estas herramientas para el control de sus recursos y pueda gestionarlos de manera eficiente.
El Asesor tiene el conocimiento técnico y la experiencia de un amplio portafolio de instrumentos de inversión de renta fija y variable, fondos de jubilación, planes de ahorros, seguros entre otros. Además está en constante actualización del movimiento de los mercados para poder brindar una asesoría apropiada al cliente en función de sus necesidades y su proyección futura.
QUINTA DIFERENCIA: Acompañamiento Vs Asesoría
El Coach te acompaña en el proceso de transformación de la forma de administrar tu dinero.
En resumen: Un coach te facilitará herramientas, conocimientos y habilidades para que desarrolles la capacidad de gestionar tus recursos y construir tu patrimonio.